Paseo por la Tejeda de Tosande
Este bosque de tejos milenarios, el más grande de Europa, se encuentra en Palencia. En la Comunidad Autónoma de Castilla y León.
Situado dentro del Parque Natural Fuentes Carrionas, en el corazón de la Montaña Palentina. Este parque linda en su parte norte con el sur de Cantabria.
Precisamente por estar a poco más de una hora de Santander, capital de Cantabria, decidimos hacer una excursión para conocer los famosos tejos milenarios, cercanos a Aguilar de Campoo.
Primera parada en Aguilar, donde nos esperaba Marisi Martín la mejor anfitriona y guía que podíamos tener. Marisi, ama y conoce su tierra por igual. Precisamente durante años ha luchado en el parlamento de Castilla y León, por el bienestar de su gente y protección de su Patrimonio. Puedo afirmar que si hoy la ermita rupestre de San Vicente y su entorno, en Cervera de Pisuerga, está protegida y señalizada es gracias a los años que pasó alzando su voz en el Parlamento de Valladolid.
Partiendo de Aguilar de Campoo, nos dirigimos a Dehesa de Montejo, y buscamos el aparcamiento de coches situado en el Kilómetro 2 de la CL-626 de Cervera a Guardo.
Junto al aparcamiento, varios carteles informativos nos indican con detalle el tipo de vegetación que vamos a encontrar y el recorrido de la senda hasta los tejos. Desde este punto el recorrido hasta llegar a los tejos es de 5 Kilómetros de ida y otros tanto de vuelta.
Panel informativo
Comenzamos el recorrido, una preciosa y soleada mañana de enero, a una temperatura de 5º bajo cero. Cuesta abajo, por una pista en la que al fondo vemos el arco de piedra construido para que pase el ferrocarril de la Robla, pasamos bajo el arco y se continua siguiendo el curso del arroyo de Tosande.
En estas fechas parte del agua estaba helada.
Aún nos esperaba, un poco más adelante otra congelada sorpresa, el abrevadero de agua de la vacas completamente congelado, una curiosa imagen que no había visto jamás hasta ese momento.
Se continua el camino, perfectamente marcado con pequeñas balizas, entre cantos rodados y la hojarasca de hayas y robles, ascendiendo suavemente.
Cuando ya se llevan unos 4 Kilómetros andados, llegamos a una gran pradería, el Valle de Tosande, en la que encontraremos una señal indicando que el camino continua a la izquierda ¡ Ahora llega lo duro!
A partir de esta señal, el camino se adentra en un precioso bosque de hayas y robles. El ascenso se hace más fatigoso pero más bello, todo el camino ( último kilómetro) es una inmensa alfombra de hojas secas.
Comienza un camino de peldaños de madera
Desde hace unos tres años, para facilitar el camino por estas empinadas laderas, se han colocado unas escaleras de madera e incluso se encuentra algún banco para descansar y disfrutar de este Patrimonio Natural. Así mismo el sendero está perfectamente marcado por un entarimado que protege el suelo y las raíces de estos 800 milenarios árboles sagrados.
El bosque encantado
Al final de la ascensión, se llega a un mirador desde el que se puede ver Peña Labra, Tresmares o el Curavacas.
mirador en la cumbre
Vistas desde el mirador
Para descender hay dos opciones : retroceder por el mismo camino de subida, en mi opinión se disfruta más de la biodiversidad del bosque, o bien seguir la flecha de bajada que está situada en el mismo mirador y que acorta un poco la vuelta.
Ya de vuelta, cerca del aparcamiento tres mastines guardaban el ganado
Se ha de tener en cuenta que, en otoño e invierno, suele haber batidas de caza dos o tres veces al año. De hecho el próximo día 13 de enero, estará cerrado el acceso a Tojande. Por ello es recomendable llamar al teléfono de " Casa del Parque " 979 870688
Después de la caminata a disfrutar de la gastronomía
Restaurante " La Galería "
Llegamos muy tarde a comer pero mereció la pena. ! Que garbanzos con callos!!!!! en restaurante " la Galería " en Cervera de Pisuerga. Y para llevar a casa, de recuerdo, en la pastelería de los soportales situados frente al restaurante, los famosos " socorritos " de hojaldre.
