CIUDADELA
Ciutadella es la capital que está al Oeste de la isla, fue capital hasta 1714 en que fue ocupada por los ingleses. El gobernador ingles, Sir Richard Kane, llevó la capital a Maó como replesalia por el "poco cariño" que mostraban los habitantes de Ciudadela al invasor ingles.
Tiene más habitantes que Maó y es la ciudad sede del Obispado.
El casco antiguo es una pequeña ciudad fortificada, de ahí su nombre. La herencia musulmana ha quedado reflejada en sus laberínticas calles, repletas de comercios, mercadillos, terrazas y bares.
La Catedral
Esta catedral, comenzó a construirse en 1287 fecha en que Alfonso III de Aragón entra en la isla y se la arrebata a los musulmanes.
Comenzó a levantarse en estilo Gótico Catalán pero posteriormente ha sufrido restauraciones y reformas hasta llegar al neoclásico de su fachada, de 1813.
Está situada en el centro de la ciudad que es además el punto más alto.
Es sede episcopal desde 1795 y en 1953 se convirtió en Basílica menor.
visita 4 €
Si aprovechas los conciertos de órgano que hay todas las tardes podrás entrar por 5 €
Si no quieres pagar tendrás que madrugar, la única misa es a las 9 de la mañana.
El Escudo pequeño del rey de España con el toisón de oro fue utilizado regularmente hasta el final del reinado de Isabel II ( 1868 ).
Lleva en sus cuarteles, los símbolos de Castilla y León, y en el escusón, las armas de la Casa de Borbón en España (las flores de Lis ).
Junto a la Catedral se encuentra el Palacio Episcopal de estilo neoclásico, con un bello patio ajardinado
EL CENTRO HISTÓRICO
El centro histórico se concentra entorno a la Plaza Es Born, allí se encuentra el Ayuntamiento el Palacio de Torres-Saura , el de Salort y el teatro des Born.
El palacio del Conde Torresaura, de estilo barroco se construyó en 1839. Destaca la majestuosa fachada con un voladizo esculturado siguiendo la estética neoclásica francesa. Imponente galería formada por tres arcos a doble altura y separados por pilastras de orden jónico.
En esta casa residió la reina Isabel II en su visita a la isla en 1860.
El conjunto formado por las dos casas Torresaura y Salort con sus fachadas neoclásicas forman el conjunto urbano más impresionante no sólo de Ciudadela sino de toda Menorca.
El Palacio de Salort, edificio señorial levantado tambien en el siglo XIX (1813) en estilo neoclásico.
Actualmente es un museo que muestra el pasado señorial menorquín, en las salas de la primera planta pueden verse tapices franceses y muebles de estilo inglés. Se situa al lado de Torresaura, separados por la calle mayor.
EL AYUNTAMIENTO
Fue Real Alcazar con los musulmanes, después fue el Palacio del Gobernador y desde 1925 tras varias reformas este edificio se ha convertido en el ayuntamiento de la ciudad.
El Obelisco es un monumento erigido a la memoria de las victimas del ataque turco en 1558.
A pocos metros del ayuntamiento y del Teatre des Born se encuentran unas escaleras para bajar al puerto y un mirador desde el que te puedes asomar para contemplar el puerto.
Puerto de Ciudadela visto desde el mirador de Es Born
El puerto en verano es un lugar muy concurrido por los turistas, pues ofrece muchos locales para el ocio y disfrute de su gastronomía. En las noches se llena de música y se convierte en un zoco. Además es el lugar perfecto para poder contemplar los veleros de todas las naciones que en sus muelles se dan cita.
Volvemos a la plaça Es Born para adentrarnos por las estrechas callejuelas del centro es justo en estas laberínticas calles donde se deja notar la herencia musulmana.
También se nota en sus calles llenas de artistas, que es una ciudad abierta al mundo.
Esta iglesia se levantó en el siglo XII, pero fue destruida por los turcos cuando asaltaron la ciudad, más tarde reconstruida y reformada.
Aquí en una de las capillas se puede ver la imagen de un santo católico que no es muy habitual en otras iglesias, San Cripín.
San Crispín y su hermano Crispiniano, dos nobles romanos, fueron martirizados en el siglo III, se dedicaban a hacer zapatos, por eso son los patrones de zapateros y peleteros.
Dejamos Ciudadela y nos vamos a unos 50 Km para visitar Mahón, pero antes de llegar a la capital nos dirigimos a La Mola y a Es Castell muy cercanos a Mahón.
La Mola, es la fortaleza militar de mayor valor histórico y arquitectónico de Menorca, fue Isabel II quien lo mandó levantar en la segunda mitad del siglo XIX.
La Mola como popularmente se conoce, está estratégicamente situada en la bocana del puerto de Maó,
actualmente es uno de los punto de mayor interés turístico.
Cañones, fosos, aljibes subterráneos, rampas .....visita muy recomendable. 8 € entrada.
Enfrente de la Mola está la isla de Latzareto, visita interesantísima pero que sólo es visitable los domingos.
Es un recinto fortificado que se creo para que pasasen la cuarentena, antes de entrar en la ciudad, todos los que llegaban a la isla por barco. Más tarde también sirvió para recluir a enfermos contagiosos.
Su construcción es de 1807, pertenece al Ministerio de Sanidad, por lo que todos los veranos funciona como Escuela de Verano de Salud Pública.
Como es una isla, salen excursiones en barco desde Mahón para poder visitar el Latzareto.
Es Castell
Es un pequeño pueblo, cercano a Mahón, que por la belleza de su puerto merece la pena visitar.
Es Castell
Es un pequeño pueblo, cercano a Mahón, que por la belleza de su puerto merece la pena visitar.
El paseo, por el largo muelle, está lleno de tiendas y restaurantes llenos de vida y de turistas.
Restaurantes a pie del muelle de Es Castell
De Es Castell, debo decir que me llamó la atención el trato y la amabilidad de las personas que regentan tanto un comercio como un local hostelero.
En cualquier local se dirigían al cliente casi siempre en su idioma, tanto camareros como dependientes.
Destacaré el restaurante Miramar
Terraza del Restaurante Miramar
Como anécdota añadiré que, definitivamente después de visitar Castell he decidido ponerme a dieta, pues los camareros se empeñaban en hablarme en Alemán.
En cualquier local se dirigían al cliente casi siempre en su idioma, tanto camareros como dependientes.
Destacaré el restaurante Miramar
Como anécdota añadiré que, definitivamente después de visitar Castell he decidido ponerme a dieta, pues los camareros se empeñaban en hablarme en Alemán.
Me queda pendiente mi visita a Mahón........
Yo tambiénpaso por el "miramar" de es Castell de vez en cuando.
ResponderEliminarSaludos
http://enmenorca.wordpress.com